Washington, D.C. – Hoy, Pan para el Mundo expresa consternación ante la indecisión de la Corte Suprema de Estados Unidos en el caso U.S. v. Texas. Esta irresolución les impedirá trabajar legalmente en Estados Unidos a unas cinco millones de personas, y las pone en riesgo de deportación y de verse separadas de sus familias.
La siguiente declaración la ofreció el obispo José García, director de relaciones eclesiales de Pan para el Mundo:
“La indecisión de la Corte Suprema hoy pone a millones de personas en nuestro país en riesgo extremo de hambre y pobreza. Los niños inmigrantes y sus padres padecen inseguridad alimentaria a tasas por encima de la población general. Las acciones de Pan para el Mundo respecto a la reforma migratoria están arraigadas en la afirmación de que todos los hombres y las mujeres fueron creados a la imagen de Dios (Génesis 1:26-28).
“Como cristianos y partícipes en Pan para el Mundo, nosotros creemos que ninguna persona difiere de ninguna otra. Por ende, estábamos esperando una decisión de la Corte Suprema que afirmara la dignidad de las familias que se beneficiarían de DACA y DAPA y que ayudara a sacar a las personas de la pobreza.
“Pan para el Mundo seguirá abogando por reforma migratoria nacional que contribuya a la disminución de la pobreza y el hambre a nivel mundial”.
“As you therefore have received Christ Jesus the Lord, continue to live your lives in him, rooted and built up in him and established in faith.” These words from Colossians 2:6 remind us of the faith that is active in love for our neighbors.
The Bible on...
Dear Members of Congress,
As the president and Congress are preparing their plans for this year, almost 100 church leaders—from all the families of U.S. Christianity—are...
The Supplemental Nutrition Assistance Program (SNAP) is designed to respond to changes in need, making it well suited to respond to crises such as the COVID-19 pandemic.
Bread for the World and its partners are asking Congress to provide $200 million for global nutrition in the fiscal year 2020 budget.
In 2017, 11.8 percent of households in the U.S.—40 million people—were food-insecure, meaning that they were unsure at some point during the year about how they would provide for their next meal.