Pan para el mundo es una voz colectiva cristiana que urge a los líderes de nuestra nación a erradicar el hambre en Estados Unidos y el extranjero.
Nos enfocamos en cambiar políticas, programas y condiciones que permiten que el hambre y la pobreza persistan, así ayudamos a crear oportunidades en comunidades alrededor del país y el mundo.
Es posible erradicar el hambre en nuestro tiempo. Cada uno de nosotros, pero especialmente nuestro gobierno, debe hacer su parte.
En el Congreso, y con el trazo de una pluma, se pueden redirigir millones de dólares a través de políticas públicas que afectan a millones de personas.
Al hacer que nuestras voces sean escuchadas en el Congreso, contribuimos a que las leyes de nuestra nación sean más equitativas, compasivas y así, podemos erradicar el hambre.
Pan prepara a la gente para escribir correos electrónicos, cartas personalizadas, a reunirse con sus miembros del Congreso y a trabajar con otros para erradicar el hambre. A través de iglesias, escuelas y otras organizaciones, involucramos a la gente en la propugnación.
Cada año, Pan invita a las iglesias en todo el país a hacer una ofrenda de cartas al Congreso sobre legislación importante para las personas que padecen de hambre y viven en la pobreza. Organizamos campañas para aprobar o bloquear legislación federal, o políticas públicas.
Como una organización sin fines de lucro, Pan trabaja de manera bipartidista. Nuestra red de miles de miembros, iglesias y denominaciones asegura la presencia del Pan en todos los distritos del Congreso de Estados Unidos. Somos muy efectivos en confrontar al poder con la verdad en amor y en el momento oportuno.
Juntos, ayudamos a crear la voluntad política para acabar con el hambre y la pobreza.
La gracia de Dios en Jesucristo nos mueve a ayudar a nuestros vecinos, ya sea que vivan en la casa de al lado, otro estado o en otro continente.
Enfrente el problema del hambre, hable, únase a nosotros. Su silencio permite que la gente permanezca en la pobreza y el hambre. ¿Qué puede hacer una sola persona? Mucho — Únase a Pan para el Mundo y marque la diferencia.
Afghanistan would be considered likely to have high rates of hunger because at least two of the major causes of global hunger affect it—armed conflict and fragile governmental institutions.
Malnutrition is responsible for nearly half of all preventable deaths among children under 5. Every year, the world loses hundreds of thousands of young children and babies to hunger-related causes.
Bread for the World is calling on the Biden-Harris administration and Congress to build a better 1,000-Days infrastructure in the United States.
“As you therefore have received Christ Jesus the Lord, continue to live your lives in him, rooted and built up in him and established in faith.” These words from Colossians 2:6 remind us of the faith that is active in love for our neighbors.
The Bible on...
The Supplemental Nutrition Assistance Program (SNAP) is designed to respond to changes in need, making it well suited to respond to crises such as the COVID-19 pandemic.
Bread for the World and its partners are asking Congress to provide $200 million for global nutrition.
In 2017, 11.8 percent of households in the U.S.—40 million people—were food-insecure, meaning that they were unsure at some point during the year about how they would provide for their next meal.