Pan para el Mundo es una voz colectiva cristiana que insta a los lideres de nuestra nación a poner fin al hambre tanto en nuestro país como en el extranjero. Movidos por la gracia de Dios y el amor por Jesucristo, alcanzamos a nuestros vecinos, ya bien sea que éstos vivan en la casa del lado, en el próximo estado o en otro continente. Somos una organización que opera bajo el principio de que los cristianos son motivados por su fe para erradicar el hambre.
Pan cree que el llamado moral de los cristianos es a comprometerse políticamente. Practicar la ciudadanía bajo la cobertura de la fe es nuestro derecho bajo la Constitución de los Estados Unidos. El hambre es un asunto completamente político y uno que debería estar entre aquellos de mayor importancia para nuestro gobierno federal. Servimos a Dios cuando traemos asuntos tales como el hambre y la pobreza ante la atención de nuestro gobierno.
Pan trata con las causas del hambre y las condiciones que permiten que ésta persista. Creemos que nuestro gobierno federal tiene los recursos, el poder y la influencia para cambiar estas condiciones y poder erradicar el hambre en nuestro tiempo. Por ello, Pan ha asumido la posición de tratar con el hambre a nivel mundial a través de la abogacía. Pan conecta a los cristianos en Estados Unidos, con sus miembros del Congreso, a fin de crear la voluntad política para erradicar el hambre tanto en casa como en el extranjero.
“Nuestra parroquia apoya a Pan para el Mundo debido a que hacerlo aumenta nuestra voz en Washington, D.C., a favor de las personas pobres y hambrientas.”
Cuando actuamos como miembros de iglesias y fieles cristianos, llevando el mismo mensaje al Congreso, pidiéndole la erradicación del hambre, tenemos una mayor probabilidad de ser escuchados. Cuando hablamos colectivamente, somos más fuertes, y amplificamos nuestra voz individual.
Las corporaciones y los intereses tienen poderosos grupos de cabildeo en el Capitolio. El mensaje sobre la erradicación del hambre también puede ser presentado a aquéllos que toman las decisiones a través de un poderoso grupo de abogadores. Como parte de la Iglesia, y nuestros abogadores son cristianos que ejercen sus derechos y responsabilidades como ciudadanos y residentes de los Estados Unidos.
Muchos cristianos pertenecen a una iglesia, un lugar donde adoran y practican su fe. Debido a que es en las congregaciones donde muchos cristianos se reúnen de forma regular, y debido a que las congregaciones forman a los discípulos que trabajan en el mundo, Pan colabora con las iglesias como plataformas de lanzamiento para la movilización de los cristianos en abogacía.
Como instituciones vivas que sirven a las comunidades, las iglesias son especialmente importantes en compartir nuestra misión de erradicar el hambre y fomentar el cambio.
Pan puede ser un recurso y trabajar con usted para empoderar a su familia, iglesia, comité de ministerio social, grupo de un recinto universitario, red comunitaria, o grupo de estudio bíblico para levantar su voz con el propósito de erradicar el hambre.
“As you therefore have received Christ Jesus the Lord, continue to live your lives in him, rooted and built up in him and established in faith.” These words from Colossians 2:6 remind us of the faith that is active in love for our neighbors.
The Bible on...
Dear Members of Congress,
As the president and Congress are preparing their plans for this year, almost 100 church leaders—from all the families of U.S. Christianity—are...
The Supplemental Nutrition Assistance Program (SNAP) is designed to respond to changes in need, making it well suited to respond to crises such as the COVID-19 pandemic.
Bread for the World and its partners are asking Congress to provide $200 million for global nutrition in the fiscal year 2020 budget.
In 2017, 11.8 percent of households in the U.S.—40 million people—were food-insecure, meaning that they were unsure at some point during the year about how they would provide for their next meal.