Le pedimos al Congreso que adopte normas de inmigración y protección de la frontera inteligentes.
Pan para el Mundo reconoce que el hambre está relacionada con la inmigración en ambos lados de la frontera. Hacemos un llamado al Congreso para que adopte un enfoque integral, que dé la bienvenida a los inmigrantes y aborde las causas de raíz de la inmigración indocumentada.
Continuaremos presionando al Congreso para que colaboren de manera bipartidista y aprueben legislación que proteja la dignidad y los derechos que Dios le ha dado a todo ser humano.
Aunque Estados Unidos gasta anualmente más de $11 mil millones de dólares en la protección de la frontera, todos los años llegan miles de inmigrantes indocumentados.2 Este nivel de gastos en protección fronteriza, incluyendo el personal, ha tenido un impacto mínimo en reducir la inmigración de personas indocumentadas y se ha pagado un precio muy alto en términos económicos y humanos. Por ejemplo, la información del Departamento de Seguridad Nacional revela que la cantidad de inmigrantes que han muerto cruzando la frontera, prácticamente se ha duplicado durante más de una década.
Los fondos para la patrulla fronteriza son casi 17 veces más que la ayuda aportada para Centroamérica