¡El trabajo de Pan para el Mundo, organizando comunidades y personas para que dejen oír sus voces con respecto al hambre y la pobreza, tiene resultado!
La abogacía es una tarea ardua y en ocasiones las victorias no ocurren inmediatamente. Pero Pan ha abogado durante décadas y posee la experiencia y el historial para traer esperanza y oportunidad a personas en los Estados Unidos y el extranjero.
Más fondos para el Servicio Suplementario de Nutrición para Madres, Infantes y Niños (WIC, según sus siglas en inglés) y el programa Head Start.
Los recortes propuestos a programas para familias de bajos ingresos fueron reducidos de $3 trillones (trillón E.U.A.) a menos de $50 billones (billón E.U.A.) en recortes
La extensión en los créditos tributarios ha ayudado a 13 millones de familias trabajadoras de bajos recursos.
Pan dirigió la coalición legislativa que obtuvo el alivio de la deuda para países pobres.
Las victorias obtenidas por Pan a menudo tienen efectos duraderos y establecen la política y el financiamiento que benefician a personas a largo plazo.
Continuamos involucrados en una variedad de asuntos que afectan a las personas que están a riesgo de padecer hambre:
A menudo, los niños son los más afectados cuando del hambre se trata. Pan siempre ha estado comprometido al fortalecimiento de programas que le proveen a los niños los alimentos y la nutrición que necesitan. A través de los años hemos ayudado a asegurar mejor nutrición, aumentar el acceso a los alimentos, establecer pautas de nutrición más claras y a incrementar los fondos para programas tales como WIC y aquellos para los desayunos y almuerzos escolares, así también como para los programas de alimentación de veranos.
El Programa de Ayuda Alimenticia Suplementaria (SNAP, según sus siglas en inglés—antes conocido como cupones para alimentos) es la manera principal en la cual nuestro gobierno ayuda a las familias norteamericanas a colocar alimento en la mesa cuando los presupuestos son apretados. A través de los años, Pan ha apoyado exitosamente las mejoras y reformas a SNAP. Estos cambios permiten que el programa haga exactamente aquello para lo cual fue diseñado: ser una red de seguridad para las familias en tiempos de necesidad.
Pan siempre ha sentido una gran preocupación por las personas que sufren de hambre tanto en casa como en el extranjero. Nuestra abogacía ha ayudado a los países en desarrollo a adoptar mejores prácticas agrícolas. La misma también ha impulsado a nuestro gobierno a proveer ayuda extranjera y alimentos de emergencia de una forma más hábil. Nuestra meta es que los Estados Unidos se conviertan en un socio que ayude a otros países a convertirse en autosuficientes. Logramos esto al impulsar programas de sentido común con un buen historial, para que el dinero recaudado en nuestro país, a través de los impuestos, sea utilizado de forma sabia.
Cuando de mecanismos para la lucha contra el hambre se trata, tal vez usted no piense en el Crédito por Ingreso de Trabajo (EITC, según sus siglas en inglés) y en el Crédito Tributario por Hijo (CTC, según sus siglas en inglés). Sin embargo, estas medidas han probado ser las más efectivas en sacar a las familias norteamericanas de la pobreza. Apoyar programas como éstos, los cuales ayudan a que las familias se alimenten a sí mismas, es parte importante de la consecución de nuestra misión para la erradicación del hambre.
Nos encontramos evaluando constantemente dónde podemos tener mayor impacto en nuestra abogacía. Algunos asuntos nuevos que hemos comenzado a tratar lo son la inmigración, la encarcelación masiva y la manera en la cual las mismas afectan el hambre y la pobreza. Para más información acerca de los asuntos nuevos, vea el Blog de Pan (en ingles) y la Ofrenda de Cartas.
Afghanistan would be considered likely to have high rates of hunger because at least two of the major causes of global hunger affect it—armed conflict and fragile governmental institutions.
Malnutrition is responsible for nearly half of all preventable deaths among children under 5. Every year, the world loses hundreds of thousands of young children and babies to hunger-related causes.
Bread for the World is calling on the Biden-Harris administration and Congress to build a better 1,000-Days infrastructure in the United States.
“As you therefore have received Christ Jesus the Lord, continue to live your lives in him, rooted and built up in him and established in faith.” These words from Colossians 2:6 remind us of the faith that is active in love for our neighbors.
The Bible on...
The Supplemental Nutrition Assistance Program (SNAP) is designed to respond to changes in need, making it well suited to respond to crises such as the COVID-19 pandemic.
Bread for the World and its partners are asking Congress to provide $200 million for global nutrition.
In 2017, 11.8 percent of households in the U.S.—40 million people—were food-insecure, meaning that they were unsure at some point during the year about how they would provide for their next meal.